Brian
Brown / Aleteia
Si
usted es como la mayoría de las personas, va a ser difícil saber lo que tiene
que hacer cuando un amigo suyo esté sufriendo. Y, para su amigo, probablemente,
va a ser difícil saber qué hacer con el sufrimiento.
Este
sufrimiento puede ser la muerte de un pariente o de un amigo, la pérdida del
trabajo, el final de una relación o sólo la sensación de que el universo le dio
una patada en la cara y no ha quitado el pie desde hace ya un buen tiempo.
Muchas
veces, usted recurre a los clichés de siempre y los repite para sí, intentando
animarse o convencer al universo de dejarlo en paz. Y los repite para los
amigos, intentando hacer lo mismo por ellos. A veces, los clichés son para
pensar, pero, muchas veces, son sólo dispositivos para escapar de lo que está
sucediendo.
El
libro “Invitation to Tears” (Invitación a las Lágrimas), de Jonalyn Fincher y
Aubrie Hills, ofrece una mirada agradable y diferente al dolor. Los autores
sugieren que aprender a experimentarlo es valioso: es un valor que nuestra
cultura ha descuidado y que nosotros hemos ido desaprendiendo.