sábado, 28 de abril de 2012

¿Qué valores tener en cuenta?

Si un grupo de personas hiciéramos una lista de todos los valores que conocemos y los pusiéramos "por orden de importancia"... ésta sería enorme y también nos encontraríamos con otras cuestiones:
  1. Con toda seguridad el orden en esos valores sería distinto según quien haga esa lista (ello tiene que ver con nuestras experiencias y vivencias que cada cual hemos tenido en relación con esos valores y las circunstancias en que se ha desarrollado nuestra experiencia).
  2. Podría suceder también que en alguna lista se hallen "valores" que, para el resto, sean "contravalores" (es decir: comprobaríamos que el defender una decisión, una conducta, una motivación,... tiene que ver sobre todo con nuestra forma individual de percibir ese valor)... y se descartan otras perspectivas o bien no se valoran de igual manera que hacen los demás.
  3. ...
¿Cómo entender si algo es realmente un "valor" o no lo es?.
En el capítulo anterior titulado "¿Qué es educar en valores?" mencionábamos esto ya y además se puede deducir fácilmente de su lectura que "todo aquello que ayude a la persona a generar en sí misma satisfacción duradera, realización personal, buena relación interpersonal en cualquier ámbito, orientación y sentido de su vida,... en suma: felicidad,... todo ello puede ser considerado como "valor".

martes, 24 de abril de 2012

¿Qué es "educar en valores"?

¿Qué son los "valores"?.

"Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud.
 
Nos proporcionan una pauta para formular metas y propósitos, personales o colectivos. Reflejan nuestros intereses, sentimientos y convicciones más importantes.

Los valores se refieren a necesidades humanas y representan ideales, sueños y aspiraciones, con una importancia independiente de las circunstancias. Por ejemplo, aunque seamos injustos la justicia sigue teniendo valor. Lo mismo ocurre con el bienestar o la felicidad.
Los valores valen por sí mismos. Son importantes por lo que son, lo que significan, y lo que representan, y no por lo que se opine de ellos.