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jueves, 23 de junio de 2016

Qué hacer ante un niño o niña de altas capacidades

Necesidades educativas de la superdotación.

A) El superdotado es un niño con necesidades educativas especiales.
Hoy en día todo el mundo parece estar de acuerdo con este enunciado, sin embargo ya hemos comentado la falta de programas específicos desde la administración pública, especialmente en algunas comunidades autónomas.
La mayoría de asociaciones de padres de este colectivo son tremendamente críticas con el estado actual de la situación. Parte del problema deriva de un modelo educativo demasiado inflexible, que no prioriza las altas capacidades, que no cuenta con recursos para la detección temprana ni de adaptaciones curriculares adecuadas para este colectivo.

B) Necesidades en el aula.
En consecuencia, la escuela debería plantearse y llevar a cabo una serie de adaptaciones básicas sobre los materiales existentes, sobre el currículo escolar y, especialmente, sobre el papel del maestro y su forma de enseñar dada su repercusión sobre el superdotado.
Siguiendo el planteamiento de algunos especialistas, el profesor del aula ordinaria debería centrarse más en las realidades de su alumnado y sus necesidades concretas y menos en las burocracias que cada vez, por desgracia, son mayores; ello le permitiría centrarse en las necesidades específicas que precisan estos niños y en la medida de lo posible implementarlas:

1) A nivel psicológico:
  1. Proporcionarles un entorno intelectualmente dinámico. Combatir el posible aburrimiento en determinadas materias a base de facilitar que los compañeros y él mismo pueda intervenir de alguna manera sobre los contenidos y no sean meros agentes receptivos.
  2. Flexibilidad en sus actividades y horarios. Normalmente no toleran bien interrupciones en su trabajo si no obedecen a una razón aceptable.
  3. No ejercer una excesiva presión respecto a rendimientos, notas o expectativas. No se debe dar por supuesto de que siempre debe sacar las mejores notas o saberlo todo.
  4. Supervisar la relación con sus iguales.
  5. Puede ser objeto de fácil etiquetado (“sabelotodo”, “cerebrito”, etc.) y presentará dificultades al no coincidir sus intereses con los de la mayoría. A veces reaccionará con un humor sarcástico y sofisticado para defenderse.
  6. Recordar siempre que pese a su avanzada capacidad cognitiva no ocurre lo mismo con sus necesidades afectivas o emocionales que se sitúan en igualdad con los de su mismo grupo de edad (disincronía evolutiva).

2) A nivel social:
  1. El principal reto consiste en conseguir que se sientan integrados y aceptados en clase. Sus peculiaridades, ya hemos comentado, los hacen objeto de burla fácil. Un entorno donde pueda confiar en sus profesores y compañeros es el mejor remedio para que ellos tengan claro que es lo que se espera a nivel social y el efecto que su comportamiento tiene en los demás.
  2. Es habitual que sus intereses específicos muy centrados en el conocer o descubrir dé una imagen en los iguales, aparentemente fría, distante y con poca empatía. Para ellos, algunos de los temas de preocupación recurrente en sus iguales (fútbol, moda, juegos, etc.) no le suscitan ningún interés y no dudan en calificarlos de banales o frívolos. Ello crea más distancia con sus compañeros.
  3. Al respecto, puede resultar útil plantear dinámicas de grupo en los que hablemos de determinados temas (también los “triviales” por ejemplo el fútbol) y se ponga de relieve el respeto a la diversidad de opiniones y la riqueza que eso supone como parte del funcionamiento social humano.

3) A nivel intelectual:
  1. Introducir una enseñanza individualizada en las materias específicas en las que evidencian esas altas capacidades, adaptando sus programas para que puedan contar con un ritmo más rápido, asignaturas especiales u opciones alternativas.
  2. Facilitarles el acceso a recursos adicionales de información en arte y ciencia y, cuando sea posible, el contacto con profesionales expertos en distintos campos. Esto no debe entenderse como una imposición sino como un acompañamiento en sus inquietudes.
  3. Debemos ser capaces como maestros o padres de incentivar su desarrollo personal pero también hacerlo capaz de compartir con los demás sus intereses y habilidades.
  4. Estos niños no siempre deben liderar todos los grupos y situarse al frente de las decisiones, sino que deben también aprender a asumir otros roles como parte fundamental de su desarrollo e integración social. Para ello podemos introducir actividades de interacción en grupo que desarrollen la capacidad social y la capacidad de liderazgo, pero también, actividades que fomenten el aprendizaje cooperativo.
  5. Hay que proporcionarles estímulos suficientes para que potencien su creatividad y puedan utilizar sus habilidades para resolver problemas y efectuar investigaciones más allá del material estandarizado.
  6. En clase preferirán las preguntas abiertas y las actividades de aprendizaje que fomenten el pensamiento creativo que requiere fluidez, flexibilidad y originalidad.
  7. Uno de los peores enemigos de estos niños en el aula es la monotonía y la rutina con poco espacio para poder participar o aportar nada.

Opciones y estrategias educativas.

A continuación se exponen algunas de las opciones o estrategias educativas que se han planteado como recursos para ayudar en la educación de este colectivo.
Hay que matizar que en la práctica suelen adoptarse una combinación de ellas y que, en todo caso, no son excluyentes, sino que se adoptan unas u otras en función de los recursos disponibles y las características del niño y su entorno.

A) La aceleración.
Durante años ha sido la respuesta más utilizada para dar respuesta a las necesidades del colectivo. La aceleración consiste en avanzar el ritmo de aprendizaje situando al niño un curso más adelantado. La actual normativa permite (si el caso está detectado y diagnosticado) avanzar un curso a lo largo de Primaria y otro en Secundaria.
Otra forma de aceleración sería la admisión en la escuela a una edad más temprana de lo estipulado teniendo en cuenta las características del niño.
Finalmente, también puede plantearse la aceleración en términos de asignaturas en lugar de cursos, adaptándolo a las características del niño.
En definitiva con esta estrategia se pretende ubicar al superdotado según un criterio no de edad sino situándolo en el nivel correspondiente a su capacidad de aprendizaje. En principio, esto resuelve la parte intelectual y además es una medida de fácil y rápida implantación. No obstante, olvida que la superioridad intelectual no tiene por qué estar asociada a un desarrollo afectivo igualmente avanzado y pueden producirse efectos negativos debidos a lo que denominamos disincronía evolutiva.

B) El agrupamiento.
Consiste en agrupar a los niños con altas capacidades en grupos dentro de un mismo centro (si existe un número suficiente de alumnado) o hacerlo en centros especializados donde se llevan a cabo programas adecuados a sus capacidades y destrezas.
Estas estrategias han sido, con frecuencia, vistas o consideradas (al menos en España) como una forma de segregación contraria a las políticas de integración. La legislación española establece que los alumnos superdotados deben estar escolarizados en centros ordinarios y no se admite la posibilidad de Centros Educativos Especiales para ellos. Contrariamente a esta posición, otros países entre los que se encuentra Estados Unidos, Japón, Corea o Suiza, sí lo hacen.
En la práctica, el agrupamiento puede ser aplicado también de otras formas. Lo más común es hacerlo de manera similar a como se utiliza el aula de apoyo para atender a alumnos con otro tipo de necesidades o problemáticas. De esta forma, el superdotado se integra normalmente en el grupo de iguales pero recibe apoyos puntuales, conjuntamente a otros niños con su perfil. Así evitamos la posible exclusión del grupo de iguales a la vez que atendemos sus necesidades.
Otros recursos interesantes para estos niños lo constituyen algunos cursos de fin de semana y campamentos de verano que se organizan específicamente para este colectivo (ver algunas asociaciones). En ellos encuentran compañeros de sus mismas características y pueden compartir experiencias.

C) El enriquecimiento.
La opción más desarrollada recientemente, como soporte a las necesidades de los superdotados en la escuela, es mantenerlos ubicados en sus clases habituales, junto con el resto de compañeros pero elaborando un currículo cualitativamente diferente que se adecue a sus necesidades.
Estos programas educativos individualizados se aplican dentro del horario escolar y suponen una mayor amplitud temática y de mayor nivel de complejidad respecto a los contenidos curriculares pertinentes.
Mediante esta estrategia, la motivación del alumno superdotado suele aumentar ya que es él mismo quien marca su ritmo de trabajo, al menos en los contenidos extendidos.
Esta estrategia es la más utilizada en el sistema educativo español y presenta bastantes ventajas tanto para el propio alumno como para sus compañeros y profesores. No obstante hay también inconvenientes en la práctica. Uno de ellos es la sobrecarga de trabajo de los profesores y el ajuste de programas a determinados alumnos supone un trabajo extra para el que quizás no hay tiempo o recursos.
También puede suceder que el niño se instale en la consecución de los objetivos curriculares básicos establecidos y no le motive iniciar una ampliación de los mismos, con lo cual se verán disminuidas sus posibilidades de crecer conforme a su potencial.

D) Otras estrategias.
Destacamos las Tutorías que consiste en responsabilizar al superdotado del rendimiento de un niño de otras capacidades, de manera que se incentiva la adecuación al nivel de lenguaje y conocimientos de éste. También una mayor comunicación con el resto de sus compañeros y una mejor aceptación por parte del grupo de iguales.
En un sentido inverso, se propone también la introducción de la figura del Mentor. Esta estrategia consiste en emparejar a un estudiante superdotado con otro estudiante de más edad o con un adulto experto que sobresale en una profesión particular o en un tema de especial interés. Ello supone para el superdotado una experiencia única de aprendizaje significativo compartido.
Finalmente mencionaremos el Homeschooling que aunque no se contempla en la actualidad en España, sí se hace de forma bastante extendida en Estados Unidos. Muchos de los niños que han optado por este sistema se debe al hecho de que el sistema escolar tradicional no ha funcionado para ellos de manera que sus necesidades especiales no pudieron ser cubiertas.
Esta opción consiste en recibir en casa una educación individualizada y ajustada a las peculiaridades de cada niño. De esta forma se pueden introducir, según necesidad, otras estrategias (aceleración, enriquecimiento, mentor, etc.). También se añaden programas para la participación en problemas de la vida real.
Evidentemente la principal objeción es el aprendizaje fuera del contexto de grupo. Igualmente los costes de esta enseñanza deben ser, en gran medida, asumidos por la familia. No obstante, en algunos casos, puede ser una buena elección si saben combinar los diferentes programas.

Altas capacidades y fracaso escolar.

¿Puede tener fracaso escolar un niño superdotado?.
La respuesta es completamente afirmativa. En otro artículo dábamos el dato de que alrededor del 30 o 40% de estos niños no alcanza el rendimiento académico esperado y que la mitad de ellos no llegarán a la universidad.
Algunos autores (Rimm, 1.986; 1994) apuntan la existencia de dos rasgos distintivos comunes en el colectivo que sufre bajo rendimiento escolar. El primero es que estos niños no han experimentado, por lo general, la correlación positiva e ideal entre sus logros personales y sus resultados académicos. El segundo hace énfasis en el hecho de que debido a su alta competitividad, no se atrevan a arriesgarse ante ciertas tareas por no sufrir una decepción.
La cuestión es que el superdotado que sufre fracaso escolar y/o bajo rendimiento, tiene con frecuencia, grandes sueños de ser famoso, estrella del deporte o de la música, etc, no obstante, no ha aprendido la disciplina o la forma idónea para alcanzar tales retos. Lo que hacen normalmente es poner excusas antes de arriesgarse a emprender las medidas correctas para llevar a cabo metas más realistas.
El superdotado con problemas escolares suele tener, además, una serie de hábitos negativos que han desarrollado para proteger, en ocasiones, su frágil autoconcepto. Es habitual encontrarnos con niños que consciente o inconscientemente manipulan a los adultos en sus vidas, tanto a los padres, como a los profesores. De esta forma se sienten protegidos a corto plazo y pueden evitar así asumir ciertos retos académicos o sociales. Evidentemente esta estrategia resulta fatal a largo plazo para su aprendizaje ya que utilizan toda su energía en generar estrategias de evitación en lugar de beneficiarse del aprendizaje en las escuelas.
La evolución de estos niños dependerá en gran medida de la detección temprana del problema, de la implicación de los diferentes agentes educativos y sociales, las características del propio niño y de la estabilidad, dedicación y recursos de sus padres y familiares.
En definitiva, a pesar de que los factores que llevan al fracaso escolar en este colectivo, son variados y complejos, podemos, desde el conocimiento de lo que sucede, intentar aplicar la combinación de estrategias y recursos que cada niño necesita para el desarrollo de su potencial.
Finalmente veamos algunas de las características específicas que puede presentar un niño con altas capacidades pero bajo rendimiento escolar.

*LOS SUPERDOTADOS CON BAJO RENDIMIENTO PUEDEN:
Características negativas:
Características positivas:
Tener falta de entusiasmo por algunas o bastantes actividades escolares. Críticos con los valores y enseñanzas de esta.
Cuando algo les interesa, son innovadores y originales aunque se muestren impacientes y poco dispuestos a perseverar en las etapas intermedias.
Desarrollar un humor, en general, es corrosivo y tienen una percepción irónica de las debilidades ajenas.
Aprender nuevos conceptos con rapidez, siendo capaces de plantear problemas y solucionarlos con ingenio.
Hablar bien, pero sus trabajos escritos son pobres e incompletos.
Ser capaces de plantear preguntas inquisitivas o provocativas, siendo muy conscientes de los problemas de las personas y de la vida en general.
Ser intranquilos, inquietos, poco atentos o fáciles de distraer, a menudo son el origen de las travesuras y de las bromas.
Ser muy perseverantes si están suficientemente motivados y pueden presentar un rendimiento elevado en alguna área.
Estar absortos en su mundo particular. Matan el tiempo sin hacer nada o distrayendo a sus compañeros.
Mostrarse innovadores en sus respuestas a preguntas abiertas. Sabios y conocedores de los asuntos de sentido común y de la vida real.
Mostrarse amigables con los alumnos mayores, buscando deliberadamente su compañía.
Ser perspicaces en las discusiones sobre las motivaciones de la gente, sus necesidades y debilidades.
Ser emocionalmente inestables, muy propensos a la melancolía y al mal humor, parecen frustrarse con facilidad y tienen poca consideración hacia los demás.

Ser exteriormente autosuficientes y aparentemente indiferentes o despreocupados por las normas.

Tener una asistencia irregular a clase, pero son capaces de seguir el ritmo de otros niños.

Manifestar una actitud defensiva, y ser muy astutos en sus argumentos y autojustificaciones.


*Adaptado de Wallace, 1988.

PARA AMPLIAR O CONTRASTAR:
PARA LA REFLEXIÓN Y DIÁLOGO EN FAMILIA:
  • Según lo que ya sabemos sobre este tema, ¿podemos decir que hay en nuestra familia niños/as con altas capacidades?.
  • ¿Qué observamos en ellos?, ¿cómo les hemos ayudado hasta la fecha a desarrollar esas capacidades?, ¿qué resultados hemos constatado?.
  • Respecto a las propuestas, consejos y estrategias que el artículo y los enlaces para ampliar nos han aportado ¿cuáles destacaríamos especialmente y por qué?. ¿Qué otras añadiríamos desde nuestra experiencia?.

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