El valor de la familia nace y se desarrolla cuando cada uno de sus miembros
asume con responsabilidad y alegría el papel que le ha tocado desempeñar en la
familia.
Al hablar de familia podemos imaginar a un grupo de personas felices bajo
un mismo techo y entender la importancia de la manutención, cuidados y
educación de todos sus miembros, pero descubrir la raíz que hace a la familia
el lugar ideal para forjar los valores, es una meta alcanzable y necesaria para
lograr un modo de vida más humano, que posteriormente se transmitirá
naturalmente a la sociedad entera...